La psicomotricidad se define como la psicología del movimiento y tiene múltiples beneficios en el desarrollo físico y cognitivo del niño. Durante los primeros años de vida de un niño es fundamental fomentarla a través de distintas actividades con la ayuda del material de psicomotricidad infantil adecuado.
¿Qué es la psicomotricidad?
La psicomotricidad es la conexión entre psico (mente) y motriz (movimiento). En pocas palabras, la psicomotricidad es la relación entre la mente y las acciones que realiza el cuerpo. Gracias a ella, se forman una mayor cantidad de conexiones neuronales en el cerebro de un niño y por eso es muy importante fomentar su desarrollo durante los primeros años de su vida.
A través de distintas actividades y con la ayuda de material de psicomotricidad infantil específico para cada situación, los niños conocen su propio cuerpo y el entorno que los rodea.
Podemos clasificar la psicomotricidad infantil en:
Psicomotricidad educativa: a través de la acción y movimiento, destinada a niños de entre 3 y 12 años.
Psicomotricidad reeducativa: destinada a niños que no han podido desarrollar correctamente las habilidades psicomotrices.
Psicomotricidad terapéutica: reservada a niños de cualquier edad que presenten discapacidad.
¿Cuáles son los beneficios de la psicomotricidad?
Como ya hemos mencionado, la psicomotricidad tiene múltiples beneficios. Gracias a la psicomotricidad el niño aprende a moverse y a tomar conciencia de su propio cuerpo en el ambiente que le rodea. Un niño en sus primeros años de vida no para de explorar el mundo a través del movimiento y esto es lo que hace a la psicomotricidad algo fundamental.
A nivel cognitivo la psicomotricidad también ayuda a mejorar la memoria, la creatividad, la atención y el aprendizaje del peque. Distintos conceptos espaciales refuerzan el conocimiento sobre la forma, el tamaño y el color de las cosas.
A nivel socio-afectivo, gracias a la psicomotricidad el niño aprende a canalizar mejor sus emociones y a descargar las tensiones. Las actividades y juegos en grupo ayudarán al peque a relacionarse con otros niños, reforzando su autoestima y personalidad.
¿Cómo fomentar la psicomotricidad?
A pesar de que practicarla desde casa es muy favorable, la psicomotricidad se suele trabajar sobre todo en las guarderías y los colegios. Con la ayuda del material de psicomotricidad infantil que se puede encontrar en las aulas, los niños podrán conocer y explorar el mundo y controlar su cuerpo.
De 0 a 3 años: Hay que fortalecer el tronco y el cuello del bebé y llamar su atención a través de distintos estímulos. Es importante preparar su cuerpo y mente para el gateo, ya que es una etapa vital en el desarrollo de un bebé. Una vez pase esta etapa y sepa andar, se pueden realizar muchas actividades y juegos de psicomotricidad: circuitos por la casa, manualidades, etc.
De 3 años en adelante: Existen muchas actividades de psicomotricidad que podéis realizar juntos en este rango de edad: juegos con bloques y aros, juegos de pelota, circuitos y gymkanas, manualidades, etc.
Existen muchas maneras de ayudar en el desarrollo de la psicomotricidad de tu peque ya sea en casa o en un aula con la ayuda de material de psicomotricidad infantil. Recuerda que lo importante es que disfrute y aprenda jugando.